La gran mayoría del gremio beisbolero pensaba que Chris Taylor podría ser el pelotero que los Dodgers cortarían de su roster de MLB tras la llegada de Cavan Biggio, cuyo pelotero utility fue adquirido el miércoles tras un cambio con los Azulejos de Toronto.
Finalmente el jugador sacrificado fue el cubano Miguel Vargas, quien tras la activación de Biggio fue enviado a ligas menores de los Dodgers.
Esta decisión efectivamente salvó a Taylor de no ser designado para asignación y todo parece indicar que tanto la directiva como el manager Dave Roberts, siguen confiando que el veterano saldrá de ese bache en el que ha estado desde hace más de dos temporadas.
Para aquellos que se preguntan por qué los Dodgers no se desprendieron de Chris Taylor, quien este año batea un miserable promedio de .100 en 38 partidos, la respuesta es sencilla: Miguel Vargas todavía tiene opciones para ser trasladado a las sucursales de ligas menores.
De hecho, Vargas no lo estaba haciendo mal, en 20 turnos legales el antillano de 24 años nacido en La Habana pegó cinco hits (.250), uno de ellos jonrón, tres dobletes y un sencillo. Además, remolcó cuatro carreras, anotó cinco y recibió dos bases por bola.
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