El tercera base de los Rockies de Colorado fue protagonista de robo de base algo extraño pero obviamente, emocionante para su equipo y aficionados; sumándose a los momentos más épicos que han ocurrido a lo largo de la actual temporada en MLB.
Ryan McMahon ha destacado por su defensa y su poder ocasional, no por su velocidad, sin embargo, aún así logró robarse el home durante la parte baja de la quinta entrada. Lo más curioso de todo, nadie intentó ni siquiera detenerlo.
El bateador zurdo, Nolan Jones, se encontraba buscando el contacto adecuado para poder enviar a su compañero al plato, pero de repente un momento destacó. Jared Jones hizo el habitual lanzamiento hacia el bateador, el cual sumó a la cuenta 1-2; el receptor devuelve la bola y mientras ésta recorre el cielo para caer en el guante del lanzador, se ve venir a McMahon desde tercera.
Ke’Bryan Hayes, antesalista de los Piratas, se encontraba alejado de la base y no estaba en posición de llegar a la almohadilla papra un pickoff, por lo que McMahon pudo llegar tranquilamente, sin meter mucho poder en las piernas.
Grandal y Jones solo hicieron un gesto de frustración al no poder acelerar que la bola cayera del cielo, sin embargo, apenas tocó el guante, Jared ni se molestó en hacer el intento de sacar al tercera base de los Rockies, mostranto total resignación a ese pequeño error, el cual terminaría constándoles un derrota de 4-16 ante Colorado.
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