El UCAM Murcia se ha defendido con uñas y dientes pero el Real Madrid ha hecho valer su superioridad en recursos y talento para resolver la Final ACB a la primera oportunidad. Apoyado en un tercer cuarto demoledor (16-34), que le ha permitido levantar diferencias que habían llegado a ser de diez puntos, el equipo de Chus Mateo ha sometido a un rival muy combativo para acabar llevándose el tercer partido por xx-xx y proclamarse campeón de la Liga Endesa 2023-24.
El Real Madrid completa así una temporada excelente, en la que ha rozado el pleno de títulos. Antes que la Liga Endesa los blancos se llevaron la Supercopa y la Copa del Rey y se quedaron a las puertas de la Euroliga, al caer ante el Panathinaikos en una final que dominó en su recta inicial pero que no supo amarrar. Se trata de las 37ª Liga del Real Madrid, que domina el palmarés con gran ventaja sobre el Barça (20).
Para el UCAM, haber llegado a la final ya era todo un éxito. Pero, a pesar de ello, el equipo de Sito Alonso salió con la ambición de pelear por una victoria que le permitiera mantener vivo el sueño. Impulsado por los triples de un inspirado Dylan Ennis, el conjunto murciano se sobrepuso a sus dudas iniciales (3-9) para llegar por delante al final del primer cuarto (19-17) y escaparse en el segundo, en el que llegó a disponer de una máxima ventaja de 10 puntos (38-28 en el minuto 18). La gran defensa de los locales sobre Campazzo y Sergio Rodríguez descabezó a un Madrid que, anulados sus creadores, tuvo muchos problemas para encontrar el aro rival.
Una técnica de Causeur y una antideportiva de Tavares ayudaron al UCAM a mantener una notable delantera durante algunos minutos (51-42), alimentando las esperanzas de un pabellón inflamado. Sin embargo, Campazzo ya se había sacudido las ataduras y, con el argentino liberado, el Real Madrid empezó a ser el de siempre. Dzanan Musa, que al final sería elegido MVP de la final, y Mario Hezonja anotaban ya con facilidad y el UCAM, perdida ya su ventaja, se fue desfondando a nivel anímico. El parcial del tercer cuarto lo dice todo (16-30), con Musa, Hezonja y Campazzo firmando 30 de los 34 puntos del Madrid.
El 56-66 con que acabó el tercer cuarto no era definitivo, y menos tras cinco rápidos puntos de Radebaugh que volvieron a apretar el marcador (61-66). Pero la acumulación de faltas de los pívots locales –tanto Diagné como Morin acabaron eliminados- fue una losa demasiado pesada para el UCAM, que tras el 66-71 del minuto 34 fue perdiendo gas y quedándose sin opciones. Su afición, a pesar de todo, premió con una merecida ovación a los jugadores de Sito Alonso en el último minuto, cuando ya la derrota era irreversible. Se la habían ganado con un temporadón que será difícil de igualar.
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