Mataron a un comerciante por cobrar 180 dólares – Nacionales

Clemente José Angulo, de 54 años de edad, vivía en el estado Carabobo y viajaba de forma constante al estado Lara para visitar a su familia. Este hombre nació, creció en la región larense y fue en esta misma región en la que murió el 1° de noviembre de 2024. 

Su cuerpo fue localizado en horas de la tarde por unas personas que transitaban por las canchas de voleibol de playa del Complejo Variquisimeto, ubicado al este de la ciudad, y quienes notaron un cuerpo de un hombre que a simple vista se veía sumamente golpeado. Además, estaba maniatado, por lo que llamaron al servicio de emergencia, cuyos funcionarios constataron la información y acordonaron la zona. 

Funcionarios del Eje de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) se trasladaron al lugar e hicieron el levantamiento del cadáver. En el momento, no tenía identificación alguna, pero la noticia del hallazgo de una persona muerta, llegó a oídos de los familiares de Clemente, quien tenían horas buscándolo. Al llegar al lugar, lograron identificarlo plenamente. 

El móvil fue una riña

La primera hipótesis manejada fue el robo, porque la víctima, quien se trasladaba en su vehículo un Toyota Corolla, año 2010, de color plateado, fue despojado del carro en el que fue localizado cuatro días después, en la avenida Vargas, entre carreras 22 y 23, hacia el centro de la ciudad. 

La localización del vehículo fue un hallazgo importante para los funcionarios del CICPC, pues al revisarlo y recabar algunas huellas digitales, pudieron identificar algunos sospechosos, entre ellos, a Evaristo Méndez Aular, de 59 años de edad, de quien conocieron más detalles. 

Una vez que se conoció de este nombre, la investigación giró en torno a él y supieron que eran conocidos, específicamente, vecinos. Evaristo cuidaba unas viviendas cercanas a donde llegaba Clemente cuando viajaba a Barquisimeto. 

Ese día, Clemente fue a hablar con Evaristo porque necesitaba el dinero que le había prestado, específicamente 180 dólares, y que en varias oportunidades se había negado a pagar. Una vez más, Evaristo no quiso asumir los compromisos adquiridos por su deuda, pero en esta ocasión, además, se molestó y comenzó a discutir con Clemente, a tal punto, que agarró un bate y lo golpeó en la cabeza y por el costado hasta dejarlo inconsciente y sin vida. 

Evaristo, valiéndose de que el homicidio fue cometido en una de las viviendas que cuidaba al este de la ciudad y de que no había testigo alguno, esperó que se hiciera de madrugada, para trasladar el vehículo de la víctima hasta la avenida Vargas y dejarlo allí abandonado sin que nadie lo viera.  Así mismo, buscó una camioneta en otra vivienda que cuidaba, allí montó el cadáver de Clemente y lo trasladó hasta el sitio donde se hizo el hallazgo del cadáver. 

En medio de las investigaciones, fueron ubicados videos que sirvieron de pruebas para conocer que Evaristo cometió el crimen y que, además, lo hizo sin ayuda. Tras haber pasado más de dos semanas el hombre pensó que no sería descubierto, y aun cuando creía esto estaba escondido, y al ser localizado por el CICPC lo detuvieron. 

En posteriores allanamientos, se practicaron pruebas en la camioneta utilizada para transportar el cadáver, pruebas de luminol que certificaron que fue asesinado en una vivienda que Evaristo cuidaba y, además, fue encontrado un bate, objeto que fue usado para cometer el crimen. 

Evaristo fue presentado por la Fiscalía 6ta del Ministerio Público de Lara, privado por el delito de homicidio calificado y, actualmente, está recluido en los calabozos del Eje de Homicidios del CICPC Lara.